Esta es una de acción. Con la participación estelar de... Willie y Zeus.
Pues bien... Clitemestra tenía cagazo de que Agamenón llegase y los pescase in fragantti (conspirando con Egisto, mal pensados!), así que le mandó un mail pidiéndole que encendiera una señal luminosa en el monte, cuando cayese Troya. Y Tolkien (que se le colgaba la pc mientras escribía "El Señor de los Anillos") pensó: "-¡Qué buena idea!".
También puso a un vigilante en el techo del palacio de Micenas. El tipo era un fiel servidor de Agamenón... así que se quedó ahí como un perro.
Hasta que una noche, el vigía este vio la señal luminosa y salió corriendo a despertar a Clitemestra. Ella hizo como que estaba re contenta de que su marido regresaba, pero lo cierto es que por dentro refunfuñaba...
- Pero la gran siete! Yo que quería que se quede ahí en Troya, el muy pollerudo vuelve.
Egisto mandó a uno de sus hombres cerca del mar para que le diera las primeras noticias de Agamenón.
La cuestión es que el tipo llegó, estaba chocho, le daba besos a la tierra, charlaba con todo el mundo y toda la pindonga. Había llegado con Casandra, y también con los hijos mellizos que tuvo con la profetisa esta. Casandra tenía el don de adivinar el futuro, pero Apolo (el que le dio aquel don) se había calentado porque ella no quería relacionarse íntimamente con él, entonces hizo que nadie le creyera sus predicciones.
Zeus: - Como la Carrió... con la diferencia de que la pobre Casandra decía la posta.
El tipo que había mandado Egisto corrió a avisarle, y Egis apostó a 20 tipos para hacer la emboscada.
Clitemestra recibió a su marido con abrazos y lágrimas y eso. Le tendió una alfombra púrpura y mandó a las esclavas a prepararle un baño caliente (más de uno de ustedes querrá ser Agamenón, pero hasta dentro de un ratito).
Casandra no quiso entrar al palacio porque empezó con sus predicciones, olía sangre y gritaba que la maldición de Tiestes estaba ahí...*1
Agamenón lavó sus partes, y cuando estaba por salir de la bañera, Clitemestra amagó con que le iba a dar una toalla, pero en realidad le tiró una malla tejida que oficiaría de red. Agamenón quedó enredado, y Egisto aprovechó para herirlo 2 veces con una espada.*2
Después Clitemestra cazó un hacha y emulando a Jack Nicholson en "The Shining" dijo:
- Here´s Johnny!!!
Y le cortó la cabeza.
Y así murió. En pelotas y decapitado.
Después, ella salió corriendo para matar a Casandra con esa misma arma.
Zeus: - Acá me encanta... cuando empieza el quilombo... ¿ves? ¡¡Aprendé Willie!! No todo es romanticismo en esta vida... contratá a Shorzeneguer para tu próxima obra...
Willie Shakespeare: - ¡Oh! Premoniciones... la venganza familiar... un asesinato... ¡AGUANTE HAMLET, PUTO!... Perdón el exhabrupto.
Se armó un tole-tole tremendo entre los tipos del bando de Egisto y los de Agamenón. Otra que un Boca-River. Se reventaron a patadas, muertos por todos lados, un descontrol. Afuera, la cabeza de Casandra rodó por el suelo, y los sobrevivientes aprovecharon para armar un partidito de fulbo. Egisto también mató a los mellizos bastardos.
Esto ocurrió un 13 de Gamelión (Enero), y Clitemestra decretó que ese día se celebraría un festival con danza y el Negro Álvarez contando chistes. Algunos dicen que está bien, otros dicen que es una mal parida que deshonró a las mujeres por toda la eternidad. Convengamos que era la primera vez que una minita se ponía los pantalones y armaba semejante embrollo... y ni hablar de "Medea"... pero esa es otra historia.
Willie Shakespeare: - Estas féminas heroínas son un festín para la literatura...
Zeus: - Todas una manga de trolas... necesitan un par de martillazos.
Menelao - el hermano de Agamenón - se enteró de este crimen, y le rindió honores por todos lados a su hermano, le creó templos y hasta un Coto y 3 Farmacity.
Pero recuerden que le habían advertido a Egisto que Orestes (hijo de Agamenón y Clitemestra) vengaría a su padre... y bueno... ya verán...
*1- En la tragedia de Esquilo (la que les recomendé) hay una escena brillante de Casandra prediciendo esta matanza mientras el corifeo se burla de ella. Es desopilante.
*2- En la misma tragedia, este asesinato es relatado de manera memorable. Cuando Egisto le clava la espada por primera vez, Agamenón exclama: "- ¡Ay de mi!" y cuando lo hiere por segunda vez, Agamenón dice: "-¡Ay de mi nuevamente".
Es buenísimo...
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